¿QUÉ ES EL STROBING?
Aquí está la respuesta: Mientras que el contouring se enfoca en esculpir las facciones creando sombras con bronzers y bases, el strobing se centra en la luz. Es una técnica de iluminación que destaca las facciones, aplicando productos que reflejan la luz en puntos claves del rostro, creando la ilusión de una piel radiante.
¿CÓMO LOGRARLO?
Lo mejor del strobing es que es muy fácil de lograr. Olvídate de los bronzers por completo y comienza con una base hidratante. Aplica un iluminador con efecto aperlado en las partes de tu rostro a las que les llega la luz del sol naturalmente: a lo largo de los huesos de cejas y mejillas, debajo del puente de tu nariz, en la forma de corazón de tus labios y en la punta de tu barbilla.
¿QUÉ ILUMINADOR DEBERÍAS USAR?
Elige un iluminador con efecto aperlado-nacarado que brille, pero sin la necesidad de glitters – recuerda que quieres un acabado radiante y fresco, no parecer una bola de discoteca. Las sombras cremosas metálicas son ideales. Si tienes piel clara, selecciona un iluminador en tono rosado. A las pieles morenas les va bien uno más dorado – pensando en Jennifer Lopez o Gigi Hadid. Si tienes piel más oscura, opta por tonos aún más complejos y oxidados. Si tu piel es grasa y tiende a brillar, te recomendamos aplicar iluminadores a base de polvo que no bloqueen tus poros.
