Lamentamos decirte esto pero tu teléfono tiene muchas más bacterias que el asiento del baño (sí, a nosotros también nos sorprendió!). Si estás teniendo muchos granitos a un lado de la cara puede ser solamente culpa de este artefacto. Limita el contacto facial utilizando la modalidad manos libres y limpia tu teléfono con toallitas anti bacteriales una vez al día.
2. Reventar Espinillas
No siempre puedes controlar que salgan pero sí puedes hacerlo una vez que ya aparecieron. Un granito puede durar un par de días pero una cicatriz puede quedar ahí por años. Si tienes una espinilla deja que siga su ciclo. Si la revientas estarás haciendo más daño que bien a tu piel.
Como la comida, el maquillaje tiene una fecha de vencimiento. La mayoría de las mascaras dura 6 meses, en tanto los labiales y esmaltes casi un año. Recuerda: si aplicas maquillaje en crema con tus dedos limpios, asegúrate de cambiar productos regularmente ya tus manos transmiten bacterias al envase abierto cada vez que lo tocas.
4. Comerte las Uñas
El gran problema de esto es que es inconsciente y no te das cuenta de que lo haces. Busca un esmalte amargo (sí, existen!) o utiliza una manicure en gel que no te deje morder las uñas.
5. Sobre Calentar tu Cabello
Dañar tu pelo es más fácil de lo que crees. Para evitarlo comienza por bajar la temperatura de tu secador y alisadora. Utiliza siempre un spray protector del calor y una mascarilla hidratante semanal, con lo que compensarás la humectación perdida.
6. No Retirar el Maquillaje
El sueño te embellece pero dormir con maquillaje revertirá esos beneficios. Hacer esto regularmente causa granitos, seca tu piel y hasta debilita tus pestañas. ¿Quién quiere eso? La mascara puede ser removida con desmaquillante, en tanto un limpiador y un tónico harán maravillas retirando la base y corrector.
7. No Usar Factor Solar
Quizás el peor hábito de belleza de todos. Utiliza FPS hasta en el día más nublado, te prometemos que tu rostro y cuello lo agradecerán!.
8. Depilar mucho Las Cejas
Esto debilita los vellos de las cejas, así es que te recomendamos aplicar la regla ‘menos es más’ cuando se trata de depilarlas. Deja que crezcan naturalmente y luego ve donde un experto que les de la forma adecuada según tu cara.
9. No Limpiar tus Brochas
¿Te lavas la cara todos los días pero nunca limpias tus pinceles de maquillaje? ¿Con suerte lo haces una vez al año? Las brochas limpias entregan un mejor acabado y así previenes el transferir bacterias sobre tu piel.
